Imagen de EDO tomada de su cuenta de Twitter |
Me parece muy importante y necesario el evento realizado ayer en el Aula Magna de la UCV. Para mi además es urgente su tema central, magistralmente descrito por EDO en su imagen: Unidad.
Esta idea debería ser prioritaria para nuestro país. La polarización nos ha hecho tanto daño que no estamos divididos: estamos fragmentados, despedazados, y aún seguimos buscando como separarnos aún más. Los efectos de esa perversa acción política están a la vista y se cuentan en miseria, muerte, destrucción, desesperanza y éxodo masivos.
Con este acto se abren caminos para la esperanza. Por supuesto que estos caminos serán largos, difíciles y culebreros. No hay de otra.
Pero me queda una pregunta. Nace de una especie de reclamo cordial que me hizo un amigo: En ese evento faltaban los ambientalistas. Entonces ¿estamos fuera de esa acción ciudadana por el rescate de la democracia?.
Realmente no se si no asistió nadie que sea parte de algún grupo ambientalista. No me fue posible asistir. Pero casi estoy seguro que no había ninguno que representara realmente a este sector.
Estoy claro que, como muchos otros, las organizaciones ambientalistas han sido muy golpeadas por la situación económica y el hostigamiento gubernamental.
Se que han desaparecido muchos grupos o han tenido que reducir sus acciones. Las plataformas que los articulaban también han decaído en sus acciones y capacidades de representación.
Además viejos recelos y la triste polarización ha impedido la necesaria organización de los reclamos alrededor de temas .tan importantes como el Arco Minero del Orinoco, la crisis de agua, la destrucción de nuestras áreas protegidas, la creciente deforestación y destrucción en cuencas y otros temas muy importantes para el país cuyos efectos son parte de la actual crisis humanitaria compleja del país.
Nos falta mucha unión para dejar de ser un territorio abierto al saqueo y expoliación de los piratas y tiranos actuales.
Asimismo, necesitamos mucho trabajo conjunto, reflexión, estudio y acción ciudadana.
Ello también es necesario para evitar que oportunistas políticos tomen la bandera ambientalista por nosotros. También debemos recordar que si nosotros no lo hacemos, el espacio será ocupado por otros, no necesariamente los más idóneos u honestos.
Pero estoy seguro que el sentimiento ambientalista aún está muy vivo en el país y se manifiesta, como siempre, de manera muy diversa y creativa. Quizás ya no como movimiento organizado. Pero somos una semilla latente esperando por germinar luego de la temporada de sequía e incendios.
La pregunta es ¿podemos esperar hasta que los buenos tiempos lleguen? o más bien ¿no tendríamos que ser un factor que ayude desde su ámbito a impulsar los cambios necesarios?
La ecología enseña que los ecosistemas surgen de las condiciones ambientales imperantes en un territorio. Pero también que los ecosistemas crean sus propias condiciones ambientales.
Así que queda abiertas las preguntas:
¿Debemos los ambientalistas participar en este proceso por la democratización de Venezuela?
En caso de que la respuesta sea si, ¿De qué maneras podemos contribuir a este proceso? ¿Cuál es el papel que podemos jugar en este momento de la historia del país?
De las posibles respuestas que le demos a estas preguntas se establecerán las bases para un futuro para el ambientalismo en Venezuela y en especial para avanzar hacia una sociedad sustentable, que haga del uso responsable de su extraordinario patrimonio natural la base de su futura prosperidad y capacidad de convertirse en una verdadera nación de oportunidades, justicia y equidad.
Espero por sus contribuciones, opiniones y propuestas.
Me parece muy oportuno este escrito. El Arco Minero es un asunto terrible de ecocidio (naturales y seres humanos).
ResponderEliminarMe parece muy oportuno este artículo.
ResponderEliminarEl arco minero es un ecocidio, donde se incluye a la naturaleza y a los seres humanos.